jueves, 28 de agosto de 2008

11 - LOS ANUNCIOS SIMULTÁNEOS

Todos los empresarios saben que no hay dinero mejor empleado que aquel que se invierte en publicidad; o, dicho de otra forma, que no hay dinero mejor "malgastado" que el invertido en publicidad ... si el mensaje no llega hasta los potenciales clientes.
En función de la capacidad económica del anunciante, de las características del producto que se quiere vender y del sector de población o mercado al que va dirigido, las agencias publicitarias diseñan una campaña optando, entre otras cosas, por el medio de difusión más adecuado para lanzar sus mensajes (prensa, radio, televisión, paneles urbanos, etc).
Si, por ejemplo, el medio elegido fuese la televisión, el objetivo sería captar la máxima audiencia en el momento de emisión del anuncio, pero hay un problema: la mayor parte de los telespectadores, con la inestimable ayuda de su mando a distancia, cambia continuamente de canal: al llegar los anuncios realizan "barridos" por todas las cadenas disponibles en busca de contenidos. El problema ya lo conocen: se llama "zaping".
Pues bien, hoy tenemos el gusto de presentar un sencillo "invento" que ofrecerá a los anunciantes la posibilidad de sortear el enorme inconveniente que representa el "zaping" para sus intereses. Basándonos en la máxima "si no puedes con tu enemigo, únete a él", aprovecharemos la tendencia natural de muchos espectadores a cambiar de canal: a partir de ahora podrán seguir haciendo lo que tanto les gusta, pero en busca de anuncios. Han nacido los ANUNCIOS SIMULTÁNEOS.
Los Anuncios Simultáneos son, como su propio nombre indica, mensajes publicitarios que se emiten simultáneamente en dos o más cadenas de televisión. ¿Qué se consigue con esta simultaneidad? ¿Por qué ahora los telespectadores van a cambiar de canal para ver los anuncios? Veamos.
Cada día, preferentemente en las horas de mayor audiencia, se emitirán tres Anuncios Simultáneos identificables porque en la parte superior izquierda de la pantalla aparecerán las siglas "AS" seguidas de un número. Por ejemplo, si fuesen cuatro las cadenas que emitiesen estos anuncios, los números irían del 1 al 4. Y los telespectadores dispondrían de veinte segundos aproximadamente para completar la secuencia. ¿En qué cadena está el AS nº 1; en qué cadena está el AS nº 2 ...?
Es decir, si en la cadena que estuviesen viendo apareciese un Anuncio Simultáneo con el número 3, rápidamente tendrían que hacer "zaping" para descubrir en qué cadenas se están emitiendo los correspondientes a los números 1, 2 y 4. Si consiguiesen completar la serie, con sólo llamar o enviar un mensaje a un número de teléfono previamente facilitado, participarían en el sorteo de un fantástico regalo, que sería mayor si acertasen los tres Anuncios simultáneos del día y "espectacular" si descubriesen los de toda la semana.
Resumimos, para terminar, las ventajas que ofrecen estos anuncios:
- Aumentan el seguimiento de los mensajes publicitarios.
- Crece, por ello, la inversión publicitaria y ...
- Al aumentar la recaudación publicitaria, las cadenas de televisión pueden mejorar su programación ... que no estaría nada mal.

lunes, 11 de agosto de 2008

10 - EL ILUSO BANK

Algunas personas siguen creyendo que los Bancos les hacen un favor prestándoles dinero o pagándoles intereses por el capital que tienen depositado en sus cuentas. Y como, además, pueden participar en sorteos de millones de euros ...
Para todas estas personas ha nacido un nuevo Banco: EL ILUSO BANK
Aprovechando la ocasión para saludarles, el Iluso Bank desea presentarles sus innovadores productos.
LA CUENTA DE LA LECHERA. El primer año le damos el 15% de interés por su dinero; el segundo, el 20%; el tercero, el 25% y así sucesivamente. Desde 10 euros (lo que cuesta una lechera)
¿Y si se rompe ...?
CUENTA "EL QUE PIERDA, PAGA". Ideal para los más ambiciosos, para quienes disfruten con las emociones fuertes; en definitiva, para quienes le pidan "más" a su dinero. Está remunerada con el interés más alto del mercado (el 23,4%) y ofrece, como otras muchas cuentas, sorteos. Pero en estos no gana nadie. Al contrario, quien resulta "agraciado" tiene que pagar al Banco el 25% del dinero que tiene depositado en la cuenta. La segunda vez que resulte "agraciado" deberá pagar el 50% de lo que aún le quede. Y si desea seguir jugando para recuperarse, la tercera vez que la "suerte" le acompañe, el ya "desgraciado" lo perderá todo.
Por último, nuestro producto estrella: LA INVERPENSIÓN.
¿Cómo anda de salud? ¿Tiene achaques? ¿Cree que le queda mucha vida por delante? Venga a vernos y le hablaremos del PLAN DE PENSIONES INVERSO. Un equipo de expertos en salud (financiera) le asesorará sin ningún compromiso (por nuestra parte). El plan puede suscribirlo a diez, a quince, a veinte años ... Como desee. En función de los años que le parezca que le quedan de vida y del capital que quiera haber acumulado al cabo de ese tiempo, se le asignarán unas cuotas mensuales que comenzará a pagar ahora y que continuará pagando hasta el final. Sin embargo, hoy mismo empezará a disfrutar de su inverpensión y, si lo prefiere, podrá retirar de una sola vez todo el capital "acumulado" a lo largo de los próximos años.
Dudas frecuentes: ¿Y qué pasará si al finalizar el Plan no se hubiese muerto?
Pues muy sencillo: el Banco le felicitará por su buena salud, le hará un pequeño regalo ... pero no le quedará ni un euro.
Lo habrá perdido todo, pero ... ¡que le quiten lo gastado!

viernes, 8 de agosto de 2008

9 - EL VOLANTE TRASERO

¿Las apariencias engañan? Sí, pero, ¿a quién? ¿Nos engañamos a nosotros mismos creyéndonos más de lo que somos?
Seguramente que sí, pero mientras tanto ... ¡aparentemos!
Que los demás nos consideren más altos, más guapos, más ricos y más inteligentes de lo que en realidad somos nos complace. Es el juego de las apariencias, un juego en el que se otorga más valor al "tener" que al "ser".

En estas condiciones tan "favorables" no es extraño que haya nacido un nuevo modelo de automóvil diseñado para aquellas personas que desean mejorar en poco tiempo su imagen pública, su consideración social. Un coche, en definitiva, para triunfadores.
El prototipo de esta nueva generación de automóviles es un vehículo totalmente de serie en su aspecto exterior, que presenta una particularidad en su interior: en los asientos traseros lleva incorporado un sistema de conducción similar al delantero, desde donde puede efectuarse su manejo.
El modelo se completa con un maniquí a modo de chófer (con gorra y todo) que va colocado en el asiento del conductor, sujeto por el cinturón de seguridad. Cristales semioscuros en las ventanillas traseras y en la luna posterior.
Por el momento, EL VOLANTE TRASERO sólo se incorporará a los vehículos de alta gama, aunque no se descarta la posibilidad de incluirlo en el futuro en los utilitarios si el mercado lo demanda.
INSTRUCCIONES: Por cuestiones de seguridad, a los usuarios del "coche que se conduce desde el asiento de atrás" no se les aconseja sobrepasar los 60 Km por hora. De esta forma, también se facilita la identificación del ilustre viajero desde el exterior.
Es, asimismo, preferible utilizarlo sólo en la ciudad o en desplazamientos cortos ( a la empresa, al club de tenis, al club de golf, al bingo ... ), ya que su conducción resulta más cansada que la clásica.
Para los desplazamientos largos por carretera recomendamos, una vez fuera del núcleo urbano, parar , meter al maniquí en el maletero y continuar el viaje conduciendo normalmente desde el asiento delantero.
Y un último pero fundamental consejo: es indispensable no utilizar este sistema todos los días, pues los vecinos podrían sospechar. No se olvide, por tanto, de dejar al maniquí en casa, al menos, un día a la semana. También tiene derecho a su día libre.
GARANTÍA: No tiene. Si le descubren el "juego", a seguir trabajando hasta que pueda permitirse un chófer de verdad.
Invertir en apariencias ... ¿es rentable?

jueves, 7 de agosto de 2008

8 - LA FICHA IMPERSONAL

¿Acaso fichan los agricultores? ¿Fichan los pescadores? ¿Y los deportistas? ¿Fichan las amas de casa?
¡Dichosa ficha! Mal menor de nuestra tan "productiva" economía. Aparentemente, la forma más adecuada de garantizar el cumplimiento, por parte de los empleados, del horario establecido por la empresa. Registra el momento de entrar y el momento de salir pero, evidentemente, no es un sistema perfecto, tiene algunas limitaciones. Entre ellas, la posibilidad de que ese rutinario acto de fichar constituya un objeto más de intercambio, como si de un favor se tratase. Alguien llega tarde por la mañana, alguien se marcha antes de la hora por la tarde y la ficha "ni se ha enterado". El trabajador "ha cumplido" su horario: lo dice su ficha.
Parece que en estos casos falta algo: responsabilidad. ¿Y cómo llegar hasta ella?
Por el momento intentaremos dar el primer paso centrándonos en la costumbre, más o menos extendida, del "fichaje por delegación": ¿Me fichas, por favor?
Hemos inventado LA FICHA IMPERSONAL. Se trata de una ficha similar a las que utilizan las empresas que llevan un control horario mecánico. Presenta una sola diferencia: no lleva escrito el nombre del trabajador ... y sin embargo, todos deben fichar en el momento de incorporarse a su puesto en la empresa y en el momento de abandonarlo. Ningún empleado posee ficha propia - cada ficha es su ficha y la de los demás trabajadores - pero al finalizar el mes todas las fichas han de aparecer debidamente cubiertas.
La Ficha Impersonal no es más que una llamada de atención, un intento de que cada trabajador asuma su responsabilidad individual y sea consciente, al mismo tiempo, de su responsabilidad colectiva. Llegar tarde habitualmente, ausentarse injustificadamente o marcharse antes de la hora es, no sólo una pequeña infracción: es, también, una falta de consideración hacia los demás compañeros. Una actitud como ésta repercute negativamente en el desarrollo colectivo de las tareas y se contagia fácilmente, haciendo un daño que no suele valorarse lo suficiente.
Pensamos que un sistema como éste no ofrecerá buenos resultados si trata de imponerse desde la dirección de las empresas, desde la voluntad de los empresarios de establecer un mayor control sobre los empleados. Por el contrario, si la idea partiese de los propios trabajadores sí podría tener éxito: cuando alguien tome una ficha, que es la suya y la de todos, y reflexione un momento, se dará cuenta de que la construcción de un futuro mejor, del que seguramente habrá hablado muchas veces, depende de cada uno de nosotros más, mucho más, de lo que queremos creer.